ILMU'L H̱ÂL

236 lillâhi’l-hamd” es recitado tres veces y la intención es he- cha de la siguiente manera: “¡Oh Rabb (Señor)! Ya que soy un gran pecador y re- belde en Tu contra, es necesario que me sacrifique por Ti. Pero Tú prohibiste el sacrificio humano, por ello sacri- fico este animal como sustituto de mi cuerpo, por favor acéptalo”. Mientras se dice “Bismillâhi Allâhu Akbar”, el animal se degüella. Es preferible que una persona sacrifique su animal ella misma. Pero si la persona no puede, debe delegar a un Musulmán para que realice el sacrificio. Es mejor estar presente durante el sacrificio. La carne del animal sacrificado se divide en tres porcio- nes. Una porción puede dejarse para ser consumida por la familia, otra porción puede ofrecerse a amigos y parientes, y la porción restante debe darse a los pobres como Sadaqah. ʻAQÎQAH El sacrificio ofrecido por un bebé recién nacido como agradecimiento a Allâh Taʻâlâ se llama ʻAqîqah. Es Mustahab (deseable) (y Sunnah de acuerdo a A’immah Ath-Thalâthah). Puede ser realizado en cualquier tiempo después del nacimiento del bebé, pero más favorable hacerlo al séptimo día. Después del nacimiento del bebé, el cabello del bebé es cortado. Sadaqah es dado en oro o plata de acuerdo con el peso del cabello del bebé y después es ofrecido un sacri- ficio. Un animal puede ser sacrificado para un niño o niña.